Actividad 16. La escuela del futuro.

Estamos en 2020 (un gran año, no cabe duda ¬¬). 

Ahora viajamos al pasado, unos 30 años antes. ¿Cómo era la escuela? ¿Cómo se impartían las clases?

Todos hemos oído historias sobre la escuela: se utilizaban extensos libros de texto, la figura del maestro era una figura de autoridad al que padres y alumnos respetaban y se le consideraba una fuente de sabiduría. No había ordenadores ni tecnologías, así que los maestros, tiza en mano, explicaban la lección con ayuda de la pizarra y los alumnos escribían en sus cuadernos. ¿Calcuqué? raíces cuadradas a mano, logaritmos a mano,... Qué lejano parece, ¿verdad?

Ahora viajamos al futuro, año 2030. ¿Cómo os imagináis la escuela?¿Cómo se darán las clases?¿Se utilizarán los libros de texto? ¿Qué papel tendrá la figura del profesor?

Seguro que todos estamos pensando en aulas llenas de tecnología: ordenadores, proyectores, pizarras digitales, una tablet para cada alumno con todo el material, incluidos los libros de texto, dónde puedan coger sus apuntes únicamente con activar la grabadora que convierta en texto la explicación de sus profesores. ¿O no habrá profesores? porque bien podrían dar la clase robots humanoides o sencillamente dispositivos como "Alexa". Los alumnos tendrían toda la información disponible. Pero, ¿entonces para que tendrían que ir a la escuela? (chicos buscad una opción b para el futuro, que la de profesor no va a tener muchas salidas...)

Todo parece muy idílico, pero me gustaría que reflexionemos con este fragmento de un capítulo de los Simpson:

Obviamente, cuando seamos profesores de aquí a unos años, muchas cosas con respecto a nuestra época de escuela habrán cambiado como consecuencia de la era digital en la que vivimos. Tendremos que adaptarnos y sacar el máximo provecho de estas tecnologías para nuestros alumnos. Pero sin duda, el profesor no podrá ser sustituido por ningún "robot". ¿Qué opináis?

PD. Y llegamos a la última entrada del blog, y cómo os prometí, os hablaré de San Bourbaki, "santo "patrón de los matemáticos de Valladolid, celebrado el último viernes del mes Noviembre.  Hoy os desvelaré el secreto: no, no es un santo; no, no es una persona, sino un grupo de matemáticos que tomaron su nombre del general francés Charles Denis Bourbaki; y sí, solo es una festividad de los alumnos del grado de matemáticas de Valladolid porque se conmemora el día en el que nos robaron la Facultad de Matemáticas y pasó a ser la Facultad de Derecho (sí, sí, la de los leones). Las celebraciones comienzan el lunes con rogativas a nuestro "santo" de la mano de nuestro "profeta, y terminan el viernes con una programación que comienza a las 9 de la mañana con rogativas, chupitada, rogativas, chocolatada, rogativas, cánticos, actividades deportivas, rogativas, comida familiar, juegos, cartas, rogativas en la Plaza de la Universidad, más rogativas y finaliza con la quema del santo.

Probablemente, algunos de los que hayáis estudiado en el campus Miguel Delibes hayáis visto a un grupo de personas que llaman mucho la atención, cantando y bebiendo, vestidos todos con la misma camiseta, y sacando en procesión a un muñeco. Tranquilos, no nos hemos vuelto locos ni somos una secta. ¡Es San Bourbaki, uno de los mejores días del año!